Badajoz, tierra de contrastes y fronteras, es una próspera ciudad comercial que esconde tesoros históricos y artísticos en sus modernas y poco llamativas calles.
En Extremadura, una de las regiones más auténticas de España, se encuentra una de las provincias más extensas del país: Badajoz: una tierra de contrastes en la que se suceden diversos paisajes como dehesas, encinares, montañas y extensiones de vegetación mediterránea.
También es tierra de frontera: Portugal está a sólo 6 km de Badajoz, un detalle que ha marcado profundamente la historia de la ciudad. El casco antiguo está atravesado por el río Guadiana y aquí y allá se abren pintorescas vistas en sus estrechas calles. Puede que no sea la ciudad más pintoresca o romántica de España, pero Badajoz tiene mucho que ofrecer a quienes deciden detenerse aquí en lugar de continuar directamente hacia otros destinos.
Badajoz cuenta con la mayor fortaleza árabe de España, un auditorio de última generación que encanta a los visitantes con su fachada que cambia de color, museos bien cuidados, parques relajantes y una deliciosa gastronomía local que hará las delicias de los viajeros gourmet.
Menos concurrida y menos cara que las grandes estrellas del turismo español, Badajoz es una oportunidad para conocer España en profundidad, sin dejarse deslumbrar por las luces de las famosas atracciones.
Contents
Qué hacer ver en Badajoz
Echa un vistazo a la lista de cosas que ver en Badajoz y te darás cuenta rápidamente de que es injusto considerar esta ciudad como una simple parada. Hay suficientes atracciones (y restaurantes) para mantenerle ocupado durante todo un día o más.
Alcazaba
Una atracción imprescindible en Badajoz es la Alcazaba, una magnífica fortaleza árabe construida en el que fue el núcleo original de la ciudad. Testigo orgulloso de siglos de historia, fue el hogar de los reyes del Reino de Taifa y una construcción defensiva estratégica para controlar las fronteras entre España y Portugal.
La fortaleza que hoy admiramos es el resultado de las modificaciones realizadas en el siglo XII sobre una construcción anterior que probablemente data de tres siglos antes. Con una superficie de 72.500 metros cuadrados, es la mayor fortaleza árabe de España y es una pequeña ciudad dentro de la ciudad, con cuatro puertas a lo largo de las murallas defensivas, torres, palacios, jardines e iglesias. Hoy en día también alberga museos, bibliotecas y facultades universitarias.
Para los turistas, visitar la ciudadela de la Alcazaba es un paseo en el tiempo con oportunidades fotográficas excepcionales: la vista desde la cima es impresionante, y al atardecer se vuelve aún más mágica.
La Catedral de Badajoz
Desde el exterior parece una fortaleza, dominada por una torre de 41 metros de altura, pero la Catedral de Badajoz es un tesoro de preciosidades.
Construida en el siglo XIII y dedicada a San Juan Bautista, esta obra maestra de la arquitectura ha sido escenario de prestigiosos acontecimientos como la histórica boda entre Juan I de Castilla y Beatriz de Portugal.
El interior es un buen ejemplo de arquitectura gótica decadente y cuenta con 12 capillas menores. Durante la visita se pueden admirar elaboradas obras de hierro forjado del siglo XVII de estilo portugués, el coro con tres órganos barrocos, el altar y una magnífica colección de tapices flamencos.
MEIAC
De ser un edificio lúgubre en el que nadie quería entrar, la antigua cárcel de Badajoz se ha transformado en uno de los museos más interesantes y coloridos de la ciudad.
Desde 1995 alberga el MEIAC (Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo), un museo de arte contemporáneo español, portugués e iberoamericano. La excepcional colección del MEIAC cuenta con más de 1.500 piezas, entre las que se encuentran obras de importantes artistas como Luis Buñuel, Ouka Leele, Equipo 57, Daniel Canogar, Eduardo Naranjo o Pablo Palazuelo.
El museo ocupa lo que fue el edificio principal del complejo penitenciario, de forma cilíndrica: fue construido en los años 50 sobre los restos de un anterior bastión militar conocido como Fuerte de Pardaleras. Tiene cuatro plantas e incluye una sección para la exposición permanente y otra para exposiciones temporales, además de un precioso jardín.
Palacio de Congresos
El Palacio de Congresos es el orgullo del Badajoz moderno: una joya de la arquitectura contemporánea que ya ha ganado prestigiosos premios de diseño del MOMA. Su estructura vanguardista ha sido diseñada para armonizar con el patrimonio histórico que la rodea, y un trozo de las murallas de la ciudad se ha integrado en el edificio.
Incluye un auditorio de 900 plazas, utilizado para todo tipo de eventos, pero no hace falta entrar para apreciar este edificio futurista: la fachada que cambia de color según los reflejos de la luz es una de las imágenes de Badajoz que se quedan grabadas en la mente de los visitantes.
El Carnaval es uno de los acontecimientos más importantes de la ciudad de Badajoz, esperado por todos los ciudadanos y vivido con gran entusiasmo. Si no puede visitar la ciudad durante los días de jolgorio salvaje o si quiere revivir la emoción de aquellos días, la visita al Museo del Carnaval de Badajoz es imprescindible.
Podrá admirar algunos de los elaborados trajes que se usan cada año durante los desfiles de la ciudad, una selección de letras y música de bandas locales, una reproducción de un taller de disfraces y una serie de documentos históricos que cuentan la evolución del carnaval desde una antigua fiesta pagana hasta la tradición de hoy.
Museo de la ciudad Luis de Morales
El Museo de la ciudad de Badajoz Luis Morales es un museo local que le permitirá descubrir la historia de la ciudad desde los primeros asentamientos, pasando por las conquistas romanas, visigodas y árabes, hasta la actualidad, así como a uno de los ciudadanos más conocidos de Badajoz.
Se trata de la casa del siglo XVI del pintor Luis Morales, artista que decoró numerosos palacios e iglesias entre España y Portugal y al que se le dedica una sala del museo.
Otros atractivos de Badajoz
Si quieres visitar Badajoz a un ritmo más pausado, toma nota de estos puntos de interés:
- plazas: Soledad, Plaza de España y Plaza de Cervantes
- palacios y casas históricas: Las Tres Campanas, Casa del Hotel Cervantes, Casa Puebla, Casas Mudéjares, Casa Coloradas
- parques: La Galera y La Legión
- museos: Museo Arqueológico Provincial, Museo de Arte, Museo Taurino
Para los que dispongan de más tiempo existe la posibilidad de realizar magníficas excursiones de un día en los alrededores de Badajoz, quizás a Mérida (capital de Extremadura) o a los parques nacionales de Monfragüe y Cornalvo.
Mapa
En el siguiente mapa puede ver la ubicación de los principales lugares de interés mencionados en este artículo
Dónde dormir en Badajoz
Badajoz no es una ciudad muy turística, por lo que la oferta hotelera es menor que en ciudades españolas más famosas, pero sigue siendo buena y los precios son baratos.
La mayor parte del alojamiento en Badajoz se concentra en la gama de precios media-baja (en su mayoría hostales, hoteles familiares, sin pretensiones pero generalmente limpios y confortables), pero no faltan las instalaciones de lujo: quienes busquen algo especial pueden elegir tres hoteles de 4 o 5 estrellas, incluso algunos con piscina.
Casi todos los hoteles están situados en el centro o a pocos kilómetros.
Hoteles recomendados en Badajoz
Cómo llegar a Badajoz
Badajoz tiene un pequeño aeropuerto al que sólo llegan vuelos nacionales. La forma más fácil de llegar a Badajoz desde Italia es… ¡ir a Portugal! Lisboa es la ciudad más cercana con buenas conexiones aéreas con Italia, incluidas las compañías de bajo coste.
Desde la capital portuguesa se puede llegar fácilmente a Badajoz con un coche de alquiler; alternativamente, hay un servicio de autobús directo: el tiempo de viaje es de sólo dos horas, pero la frecuencia de los viajes se limita a uno o dos al día, dependiendo de los días y las estaciones.
Si ya está en España, no tendrá ninguna dificultad para llegar a Badajoz en coche: la ciudad es un importante centro comercial por lo que está bien comunicada con las principales autopistas de España.
Moverse en autobús también es bastante fácil: con un autobús directo se puede llegar a Cáceres, Madrid, Mérida, Sevilla y Zafra. En el caso del tren depende mucho de la ubicación: algunos trayectos son largos y caros, es mejor utilizar este medio para moverse dentro de la región extremeña.